lunes, 20 de abril de 2015

Alguien

Muchas personas creen ser diferentes. Realmente todas los somos, toda persona es única e irreemplazable y eso nos hace diferentes. ¿Pero esa diferencia es real? Es decir, sí es cierto que toda persona tiene algo que aportar distinto a lo que aportaría otra ¿No? pero hay gente demasiado entregada a los prototipos sociales, a gustar sin precedentes, por encima de todo, aunque sean como no quieren ser sólo por complacer los ideales de una sociedad errónea.
Dicen ser especiales aún siguiendo un camino que no es el suyo, un camino que le imponen, aún siendo perros de la sociedad dicen ser especiales.
Eso no es ser especial, especial es saber lo que quieres sin que nadie cambie tu visión del destino que quieres sufrir o gozar. Alguien que ame sin miedo a que le rompan por dentro, que corra por las calles dándole igual que la gente piense que su cabeza está desequilibrada, que chille, que llore, que ría sin vergüenza, pues lo más lindo y puro del ser humano, lo que nos diferencia de los animales es que podemos expresar lo que nuestro corazón siente en cada momento.
Alguien que no se conforme, que luche por lo que quiere, alguien que no se deje llevar por las opiniones de los demás y tenga la suya propia, aunque la conciban como equivocada; alguien que quiera hacer algo, por mínimo que sea, para cambiar el mundo; alguien que consiga ser el mundo de otra persona, que sea buen amante, que consiga erizar la piel de su pareja con sólo una mirada, que su alma sea tan pura como su risa, que la locura sea su fiel amiga, que nunca pierda el niño que todos hemos sido, que sueñe y cumpla sus sueños sin impedimentos, que sea feliz aunque la vida no le deje.
Alguien que sea tan fiel a sí mismo que a veces provoque náuseas, inteligente y pícaro, pero humilde y bondadoso. Alguien que saque su demonio y no le dé miedo. Alguien libre.